Al final, el universo cada vez más amplio de la factoría Marvel ha terminado por saturarme. No lo creía posible después de lo mucho que me atraen las historias de superhéroes (quienes leéis este blog ya os habréis dado cuenta) y del buen trabajo que Josh Whedon realizó en ‘Los Vengadores’ (2012). Pero su secuela, ‘Vengadores: La Era de Ultrón‘, lejos de maravillarme y sumergirme en ese mundo de fantasía que tanto agradezco visitar de vez en cuando, se me ha hecho larga. Y eso, en una película donde héroes enmascarados luchan por salvar el mundo, es una mala, mala señal.
Quizás hay que echar la mirada atrás para averiguar por qué ‘Los Vengadores’ me cautivó con tanta facilidad mientras que ‘Vengadores: La Era de Ultrón’ me ha dejado más bien fría (cuando, irónicamente, era la secuela la que me dispuse a ver confiada en que me iba a gustar mientras que a la primera me enfrenté en su día con mucha cautela).
Desequilibrados
Bien, recuperando el texto que escribí en abril de 2012, leo que Whedon «consigue un sorprendente equilibrio entre los seis superhéroes protagonistas» y que todos viven «tanto momentos dramáticos como intimistas como secuencias de acción». Pero en ‘Vengadores: La Era de Ultrón’ ni hay equilibrio ni hay momentos para todos.
Thor está desaparecido durante más de la mitad del metraje (y cuando aparece, no le prestamos atención); Capitán América sólo entra en acción para, precisamente, darle forma a las escenas de acción; y la presentación de los dos nuevos héroes, los hermanos Maximoff, llega sin el contexto necesario que nos permita conectar con ellos. Para colmo, la presencia anecdótica de secundarios del universo Marvel como El Halcón (de ‘Capitán América’) o Máquina de Guerra (de ‘Iron Man’) no aporta nada y únicamente satura más una película de superhéroes ya de por sí abarrotada.
Por lo tanto, el aplaudido equilibrio que Josh Whedon obró en la primera reunión de los Vengadores se ha perdido en ésta. Y es que cuantos más personajes pueblan la pantalla, más complicado resulta mantener la historia amena.
¿Dónde quedaron las risas?
Por otra parte, leo también que ‘Los Vengadores’ es un filme con «mucho humor», el humor que arranca carcajadas en la sala al tiempo que hace la ciencia-ficción más entretenida y accesible al servir de respiro entre tanta pirotecnia imaginativa y concepto científico. Humor que, por mucho que intente recordar, no aprecio en ‘La era de Ultrón’. Vale que la secuencia del martillo de Thor es divertida, pero lamentablemente el primer tráiler de la película ya la desvelaba. Y Tony Stark, el preferido de la mayoría que suele enamorar con sus comentarios ingeniosos y su falta de humildad, está en esta ocasión muy falto de chispa.
Entiendo que esta secuela pretende darle un giro dramático a las aventuras de los Vengadores y preparar el terreno para un cierre de la trilogía (en realidad serán cuatro películas) épico. Pero el humor, la diversión, los chascarrillos… resultan imprescindibles, a mi juicio, para que no nos sintamos abrumados por el argumento.
Una trama sin interés
Porque ésa es otra, el argumento de ‘La Era de Ultrón’, con dos seres ultrapoderosos nuevos en este mundo y un montón de conceptos tecnológicos y biocientíficos por el camino, es demasiado denso para el espectador corriente que sólo quiere disfrutar con un espectáculo entretenido y cuyos conocimientos de la iconografía Marvel se limitan a las películas que ha visto.
Además, las subtramas que sirven de relax entre escena y escena de acción no terminan de cuajar porque parecen forzadas. ¿Bruce Banner y Viuda Negra enamorados (o algo parecido)? No me lo creo.
Menos mal, eso sí, que Whedon sigue siendo un as a la hora de rodar escenas de acción multitudinarias. Pero (empiezo a tener la sensación de que en esta crítica sólo hay ‘peros’), esta vez el ritmo se le va de las manos. La secuencia final resulta interminable y trae a la mente el recuerdo de la insufrible batalla que presenciamos en la última entrega de ‘El Hobbit’.
Hastiados
Así pues, pese a que se trata de un título imprescindible para cualquier fan del universo Marvel, que lo haya sido o que pretenda seguir siéndolo, ‘Vengadores: La Era de Ultrón’ te deja más decepcionado que asombrado.
A mí, personalmente, se me ha hecho larga, como comentaba al principio. Y eso significa una cosa: que las aventuras de los Vengadores empiezan a aburrirme. Y, creedme, me da que no soy la única. Sólo hay que fijarse en la cara de Robert Downey Jr (Iron Man) a lo largo de la película para darse cuenta de que el actor también parece estar hastiado con su personaje. Y Vengadores sin Downey Jr. nunca será lo mismo.
Nota: 6 / 10
Para recordar:
La secuencia inicial. Así se arranca una secuela de acción: con acción.
El reto del martillo. Las aventuras de los Vengadores no serían lo mismo sin momentos de relax para que los personajes interactúen entre ellos.
Para olvidar:
¿Qué le ha pasado a Tony Stark/Iron Man? ¿Dónde ha quedado su chispa?
Demasiado superhéroe en un solo lugar.
El resultado de la inevitable comparación entre el Mercurio de esta película con el Mercurio de ‘X-Men: Días del Futuro Pasado’ (2014): Aaron Taylor-Johnson sale perdiendo.
¿Por qué tengo la sensación de que la película está mal doblada? ¿Sobre todo los diálogos entre Bruce Banner y Viuda Negra? Hay comentarios que parecen no tener sentido.
30 mayo, 2015 a las 19:47
Pues yo la verdad es que pasé un rato de lo más entretenido! Y sigo sin estar saturada, estoy esperando las siguientes entregas tanto de los vengadoras como sueltos!
Un saludo!
1 junio, 2015 a las 00:06
Puede ser ( el tiempo dirá) que el nuevo cine de superhéroes desde aquel x men del 2000, llegue un día a saturar y decaiga como genero como paso con el western en los 80.
5 junio, 2015 a las 08:27
Son ya 15 años sin prácticamente respiro. Aún le queda para rato y por eso muchos todavía no estáis saturados. Pero definitivamente yo necesito ver mucho cine totalmente diferente para desintoxicarme un poco 😉
2 febrero, 2016 a las 13:59
En mi modesta opinión, existen dos momentos importantes en el cine de superhéroes moderno: por una parte, las películas de Batman, en especial el Caballero Oscuro, que creo que sirvió para que la gente se tomase este tipo de cine un poco más en serio, estableciendo un nuevo listón de calidad; y por otra parte Iron-Man, que sin ser tan serio como las que acabo de mencionar, era divertida y entretenida para la mayoría del público y no un truño infumable (alguien recuerda Linterna Verde? Espero que no).
Dicho esto, y dado que lo que nos trata es el universo Marvel, hay que tener en cuenta su tremenda profundidad. Podríamos quedarnos en los superpoderes, lo macizorros que están y las escenas de acción, pero también es cierto que en los cómics se exploran a fondo determinados temas que bien darían para otro caballero oscuro. Sin ir más lejos, el personaje de Tony Stark, pese al poco interés que generalmente ha despertado comparado con otros personajes, es de los que presenta más abismos personales. Precisamente, en esta película, se exploran, por ejemplo, algunos de los abismos del bueno de Tony, a la vez que se pretende hacer une película entretenida, y creo que ahí está el problema: demasiados temas, demasiados personajes y, en general, el que mucho abarca poco aprieta. El propio "malo", Ultrón, es un gran punto de partido para tratar la condición humana, y la relación que se podría establecer con la figura del superhéroe da para mucho, pero claro, esto es una película de Marvel, no una película sesuda que poco o nada interesa a un adolescente de 16 años.
Creo que se podría haber realizado otra era de Ultrón, más entretenida, con más profundidad. No entiendo, por ejemplo, por qué tocan tan levemente algunos temas y pretenden meternos con cola un romance que no pega ni con cola y que, en realidad, creo que no está ni bien desarrollado.
Me gustó Iron-Man 1, me gustó Los vengadores, con un equilibro interesante entre los personajes, pero creo que La era de Ultrón es un fracaso. Creo que podría haber dado mucho más de sí. Es más, creo que mucho metraje (las largas escenas de la evacuación, por ejemplo) o incluso alguna muerte es superflua. Hay tantos personajes con tan poco peso que sus "dramas" no tienen el peso necesario para impactarnos, o al menos es lo que a mí me sucedió.
Al final de la película me quedo con un "psst, qué pena". Y lo peor de todos, los útimos 15 minutos estaba esperando más a que terminase la peli que a otra cosa. Mal asunto.
5 febrero, 2016 a las 16:40
Es el problema de las historias con numerosos personajes, que o logran dotar a todos del interés suficiente para mantener el equilibrio (y puede hacerse en una única escena, como prueba la espectacular intervención de Mercurio en 'X-Men: Días del Futuro Pasado') o al final la película se convierte en un conglomerado donde sobran demasiados ingredientes. O, dicho de otro modo, si no vas a despertar interés con una trama o personaje determinado, mejor que no lo añadas. En la primera de 'Vengadores' consiguieron el equilibrio; aquí, pecaron -en mi opinión- de exceso de confianza y fracasaron. Y las siguientes entregas de la saga prometen seguir el mismo camino…
5 febrero, 2016 a las 23:23
Nah, si coincido.
Quizá lo que más me molesta de todas estas pelis es lo poco que se adentran en determinados aspectos. Sin ir más lejos, Tony Stark es, en realidad, una persona atormentada y llena de fantasmas. Se ve un poquito en esta peli, y se ve un poquito en la tercera de Iron-Man. No obstante, no llegan a profundizar y, al final, se queda un poco como una anécdota, en plan… "parece preocupado, jodido, sí", pero sin mayor chicha. No puedo evitar quedarme con un mal sabor de boca.
Supongo que en realidad tampoco podemos pedir más, dado que esto no dejan de ser pelis comerciales, blockbusters. Es posible que el tipo de gente al que van dirigidas estas pelis no quiera más. La peli podrá gustarnos o no, pero los datos están ahí, y fue la cuarta más taquillera del año pasado. Esto es un negocio y parece que les salió bastante bien.
El ars gratia artis se quedó en el cartel de la metro hace mucho.
14 marzo, 2016 a las 19:38
Es muy interesante el dato que aportas sobre el equilibrio entre los protagonistas de esta grandiosa película de Marvel, realmente en esta segunda película no se ve la coordinación porque el director metió varias historias dentro de la trama y eso hace que pierdan atención los protagonistas con la entrada de dos personajes más.